prueba

Almanzor iría a la India para traer seda y especias a la princesa, mientras que Ali, construiría una acequia para llevar el agua a la ciudad (aunque el joven Ali lo que buscaba era permanecer cerca de la princesa para poder conquistarla). Alí al estar tan cerca de la princesa consiguió que quedara enamorada de él. El corazón de la princesa eligió a Ali. Cuando regresó Almanzor, el Califa entendió que había terminado con éxito su viaje y sin saber el enamoramiento de la princesa, que ya había elegido al apuesto Ali,  le entregó la mano de ésta. Cuando Ali se enteró de la decisión no pudo soportar el dolor y se tiró por un barranco. Cuando Cántara se enteró de la muerte de Ali corrió su misma suerte quitándose la vida.

La pérdida de su hija predilecta sumió al Califa en una gran depresión, quitándose también la vida al saltar desde lo alto del castillo.

La consternación en la ciudad fue tan grande que los habitantes decidieron cambiar el nombre de la ciudad para que el nombre de los dos jóvenes amantes quedaran unidos para siempre: Ali cántara, que con el tiempo pasó a ser Alicante.